La fintech mexicana Monato, fundada en 2024 por el emprendedor saltillense Iñigo Rumayor, acaba de levantar US$13 millones en una ronda semilla que promete sacudir el ecosistema financiero empresarial mexicano. ¿Su misión? Que cualquier empresa, desde un retailer hasta una plataforma de pagos, pueda ofrecer servicios financieros sin convertirse en experta en tecnología ni perderse en la regulación.
La inversión fue liderada por Monashees y FinTech Collective, con respaldo de pesos pesados como IGNIA Partners, Clocktower Ventures, Polymath Ventures y Angel Ventures. Con este capital, Monato se posiciona como el motor silencioso detrás de una nueva generación de empresas que quieren integrar pagos, crédito o FX sin reinventar la rueda.
¿Qué hace Monato?
Monato construye infraestructura financiera como servicio, con un enfoque API-first, regulado y escalable. Su plataforma permite que empresas de retail, lending o pagos integren servicios como:
- Débito directo
- Pagos transfronterizos
- Cambio de divisas (FX)
- Soluciones de crédito inteligentes
Todo esto operando bajo Finco Pay, una IFPE autorizada y conectada al sistema SPEI, lo que garantiza cumplimiento normativo desde el día uno.
Rumayor lo resume así:
“La frase ‘toda empresa se convertirá en fintech’ no es nueva, pero la oportunidad de hacerla realidad sí lo es.”
Productos clave de Monato para empresas mexicanas
Durante el primer semestre de 2025, Monato aumentó su equipo en un 33%, incorporando talento de Amazon, PayPal, Walmart, y organismos como la SHCP y la CNBV. Este mix de experiencia pública y privada refuerza su visión: democratizar el acceso a servicios financieros desde la infraestructura.
Además, Monato ha desarrollado productos como Finch by Monato, que permite realizar transferencias SPEI individuales o masivas, generar cuentas CLABE y simplificar conciliaciones. También ofrece soluciones de B2B Lending, con tasas competitivas y alianzas estratégicas para empresas que buscan crédito integrado en sus operaciones.
La startup se enfoca en crear relaciones simbióticas con sus clientes, permitiéndoles escalar sus servicios financieros sin fricciones operativas. Su infraestructura modular se adapta a múltiples industrias, desde fintechs hasta retailers y pymes.
Con esta ronda, Monato se posiciona como una de las startups más prometedoras del país, y como un actor clave en la evolución del open finance en América Latina.